BENDECIR
Es un don que todo
ser humano tenemos, la bendición no es el gesto exterior sólo, es lo
visible, el rito, pero la verdadera bendición es desde tu interior, tu corazón,
mente, espíritu que crean un flujo de energía, deseo, buenos sentimientos, en
actitud de amor, agradecimiento. Determina una gran conexión y poder en los
demás.
Bendecir es crear un
vínculo entre ti, lo que se bendice viendo más allá de la pura apariencia conexionando
con la verdadera esencia espiritual, divina. Es ver al otro como tu verdadero
hermano, un ser al cual estás unido a todo lo que te rodea; animales,
naturaleza como algo en lo que estás integrado, maravillándote de todo lo está
a tu alrededor para que disfrutes y bendigas con amor.
Bendecir es hacerte
uno con la vida dando, reconociendo tu poder, fluyendo con ella y la
divinidad que hay en ti. Agradeces a Dios todo lo que hay, su amor hacia ti.
Bendecir no es
algo particular de nadie o ciertas personas. El padre bendice a sus hijos, se
bendicen los alimentos, comentamos con los demás bendito seas… Bendecir
conlleva salir de ti mismo, perdonarte, perdonar, dar lo mejor que tienes de
ti, por eso cuesta tanto, porque es una acción de vacío uniéndote a tu ser
espiritual para lograr lo mejor que hay en ofreciéndoselo al otro ser o seres.
Si logramos la actitud
de bendecir en nuestra vida elevaremos nuestra conciencia.
Pierre Prandervand, nos propone en El Arte de Bendecir, para vivir espiritualmente la vida cotidiana.
Al despertar, bendecir vuestra jornada, porque está ya desbordando de una
abundancia de bienes que vuestras bendiciones harán aparecer. Porque bendecir
significa reconocer el bien infinito que forma parte del universo. Ese bien lo
único que espera es una señal vuestra para poder manifestarse.
Habla de que la paz de vuestra bendición será compañera de
su camino, bendecid a los que os
encontréis, alegría, salud, bienes… todas las formas y personas imaginables.
Cuando encuentre a personas agresivas, cólera, faltas de bondad, alegría…
Bendecir significa desear y querer totalmente y sin reserva alguna el bien
ilimitado. Esto significa venerar y considerar con toral admiración lo que es
siempre un don del Creador.
Bendecirlo todo,
bendecir a todos. Bendecir esos momentos difíciles pues estás a punto de
recibir alguna lección. Bendecir significa reconocer una belleza omnipresente.
Bendeciros a vosotros mismos reconociendo el ser maravilloso que eres y digno
de amor.
Emic. 7/05/2020